Con Morales Troncoso el PRSC respira aire distinto, ganándose la confianza de la gente

POR ABRAHAM MONTERO.-

El ingeniero Carlos Morales Troncoso asumió el 7 de octubre del 2009, la presidencia del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) luego de dos meses de indecisión, cargado de ilusiones y con el gran reto de establecer la unidad, la transparencia, la lealtad, disciplina y devolver la confianza a la militancia reformista que había perdido la fe en esa organización política.

Desde entonces el líder del nuevo reformismo ha venido tomando sabias, imparciales y equilibradas decisiones en los momentos difíciles que le ha tocado vivir al frente del PRSC luego del fallecimiento de su extinto Joaquín Balaguer. Sus méritos no están en discusión ni tampoco merecen regateos.

Es evidente que sus convicciones democráticas y su compromiso con el legado histórico del líder fundador del partido Joaquín Balaguer, han sido el principal sostén de sus preclaras iniciativas institucionales y de sus estrategias de transformación, manteniendo así en alto los símbolos del partido.

Debido al constante e incansable trabajo de Morales Troncoso, el Partido Reformista avanza y en su seno ha comenzado a respirarse un aire distinto. Se ha logrado que reverdezca la unidad, el orden, la disciplina, la confianza y que surjan nuevas herramientas para el trabajo.

Las rebatiñas son comunes en todos los sectores de la sociedad, incluyendo los hogares porque nunca existe la verdad o la razón absoluta.

Todos los partidos del sistema han pasado por ciclos de reflujo, pero lo importante ahora no es mirar hacia atrás ni quejarse, sino trillar el camino hacia delante y superar las dificultades.

Los pre-congresos que se han realizado, con miras a la celebración del IV Congreso Joaquín Balaguer, han contribuido bastante a afianzar la confianza y en la dinamización del partido que en un momento se creyó muerto, pero que se ha levantado como un gigante con entusiasmo y fe en el porvenir.

Morales Troncoso ha demostrado capacidad de trabajo y voluntad para que el PRSC prevalezca como una fuerza política mayoritaria indispensable para el desarrollo y consolidación del sistema democrático del país, y muestra de ello es el crecimiento sostenido que ha experimentado ese partido en los últimos meses.

Es innegable que el partido colorao se ha convertido en una opción de poder bajo el trabajo y sacrificio de su actual dirigencia. Esta organización política tiene el gran reto de continuar siendo el “partido de la esperanza nacional” para satisfacer los anhelos de las grandes mayorías del país, principalmente de aquellos que no tienen nada.

El trabajo de don Carlos Morales está ahí a la vista de todos. Tomó el timón del barco en momento de una furiosa tempestad y llevó la nave a puerto seguro, y por tal razón debe continuar dirigiendo las riendas del PRSC.

La dirigencia y la base del partido colorao están conscientes de que esa es la mejor decisión para que el reformismo sea una verdadera opción en 2016.