Propuestas para un mejor después

POR IVELISSE PRATS RAMÍREZ DE PÉREZ.-

Peña Gómez me enseñó a mirar “más allá de la curva”. Me llevó a analizar, con ejemplos históricos contundentes, que “el PRD se agiganta en momentos de crisis. Cuando los enemigos creen que estamos a punto de zozobrar es cuando realmente llegamos a puerto”.

Asida a esta esperanza y porque sé también cuánto y cómo el país lo necesita como equilibrio de un PLD insaciable, trasciendo este caótico momento partidario y esbozo algunas propuestas para cuando mi PRD retorne a puerto, remontando con inteligencia y principios la tormenta actual, la más dura que ha azotado en su historia al partido.

En este esfuerzo propositivo, me integro a la corriente que dentro del PRD, ha empezado a entender la importancia que tiene el verbo “proponer” para la democracia, Tirso Mejía, Guido Gómez Mazara, Neney Cabrera, Luis Abinader, Nelson Espinal, entre otros, se me han adelantado. Espigo mis propuestas entre las inquietudes que comparten conmigo compañeros/as, en las resoluciones del 1er Congreso Dr. José Francisco Peña Gómez y en los empecinados propósitos que como política que cree todavía en la ideología y la ética he mantenido. Para el DESPUÉS que ha de llegar al partido, esbozo estas propuestas EN PLURAL, lo haré durante TRES sábados.

En la reacción de los compañeros/as dejo las modifi caciones y enriquecimientos: • Redefi nición y actualización del perfi l ideológico del PRD. Desde 1976, con nuestro ingreso en la Internacional Socialista, nos adscribimos formalmente a la doctrina Socialdemócrata, que asumimos latinoamericanizándola, como Socialismo Democrático. Así lo consigna nuestro Estatuto.

Treinta y siete años después, ambos conceptos, el Socialismo y la Democracia presentan nuevas acepciones, signifi cados diferentes en sus variopintas expresiones.

El socialismo democrático tiene ahora, en nuestro continente, ejemplos singulares como deben ser siempre las experiencias político-sociales: enraizadas en las realidades y los tiempos.

Propongo que el PRD, después de resolver el confl icto actual, sosamente individualista, por tanto más neoliberal que progresista, convoque un Seminario Internacional, que nos presente como menú esas nuevas experiencias.

Debemos estudiar igualmente la situación de los partidos socialistas y socialdemócratas en la Union Europea, que parecen declinar, para analizar desaciertos. Y también evaluar la evolución ¿o involución? De la Internacional Socialista.

Ya luego, en una asamblea interna, se afi narán las ideas, para fi nalmente aprobar, en los organismos partidarios ahora enmohecidos dos documentos: a) Documento de reafi rmación doctrinaria, el cual contendrá, dentro de las coordenadas generales del Socialismo Democrático, la plataforma ideológica del PRD, actualizada, vibrante, de izquierda, como lo fue en su momento el documento fundacional escrito por Enrique Cotubamaná Henríquez en 1939. Contextualizada por supuesto, en el aquí y ahora dominicano.

b) El segundo documento es lo que llamo, provisionalmente, el Plan de Acción del PRD, que será como la Reafi rmación Doctrinaria, socializado en consultas con la militancia.

El plan de acción aterrizará la ideología diseñando políticas y acciones que serán la base del Programa de Gobierno que se presentará en las próximas elecciones del 2016.

Porque nuestro programa de gobierno tiene que ser la concreción de nuestras posiciones ideológicas, articuladas con las reales necesidades y aspiraciones de los sectores de la sociedad civil con los que está comprometido prioritariamente el PRD: la empobrecida clase media, los empresarios nacionales, empleados, profesionales, trabajadores, ¡y los chiriperos de los que don Juan nos reveló sus rostros invisibilizados por la marginación y la exclusión! Este plan, a corto y mediano plazo, programará con fl exibilidad y apertura la marcha del partido, para evitar las improcedentes improvisaciones que hacen parecer a un presidente del partido como un mal prestidigitador que ensaya sacar conejos de un sombrero, y muestra solo escuálidos ratoncitos.

Es tautológico, pero no excesivo, acotar que el Plan de Acción ha de ser correlato de la defi nición doctrinaria del PRD, cónsono con las posiciones socialistas democráticas que ante los problemas nacionales e internacionales debe tomar un PRD al que debe rescatarse de su actual aislante autismo político.

Ambos documentos demandarán, casi seguramente, algunas modifi caciones en el Estatuto Partidario que es bueno, pero cuyo incumplimiento lo desgasta y desnaturaliza.

Sobre esos cambios estatutarios podríamos hacer propuestas más adelante; pero insisto, coincidiendo con Platón en que “empezar es lo más importante”, enfocando primero las propuestas en el tema que necesitamos para unir nuestra diversa composición partidaria.

La ideología brújula, ancla y timón para que el PRD navegue como partido hacia objetivos fi ables. Seguiremos proponiendo un después mejor del PRD, el próximo sábado. (LD).