Danilo llega a su primer año gobierno con una aceptación popular de 80%

POR ABRAHAN MONTERO.-

El presidente Danilo Medina llega hoy a su primer año de gobierno lleno de esperanza y con una aceptación en la población dominicana de un 80% debido a su sencillez, humildad y las acciones tomada para enfrentar los problemas básicos, como es la salud, desempleo, eléctricidad, vivienda y otros.

Medina, oriundo de un campo de San Juan, asumió el poder el 16 de agosto del 2012, y de inmediato comenzó a dar la percepción de que era diferente a los demás gobernantes electos democráticamente que han pasado por la Presidencia de la República.

Desde inicio de su mandato, Medina se ha lanzado a las calles de los barrios de la capital y pueblos del interior para escuchar y palpar la situación de la gente, principalmente de los pobres, o sea, para poner el «corazón en los oídos del pueblo».

Medina se ha hecho diferentes al mezclarse entre la gente, llegando, incluso, a desplazarse con los cristales de su vehículo bajos, dejando de lado la rigidez del protocolo y quebrando la imagen de poder y de grandeza asociada tradicionalmente a los jefes de Estado.

Aún Medina no se ha dejado cegar por las lisonjas y conserva la sencillez que lo ha caracterizado, lo que resalta al compartir el calor de una humilde morada allá en lo profundo del campo y en lo reducida de su escolta, comitiva que evade en sus acostumbradas visitas dominicales.

Ha roto con la tradición de colocar la foto del mandatario de turno en los despachos oficiales, y en principio era notoria la ausencia en actos públicos de la famosa silla presidencial, lo que se atribuía a un mandato expreso suyo, aunque últimamente sí se ha estado usando con más frecuencia.

La simpleza de su discurso lo acerca a la gente, y al verlo saltar un charco y agacharse para cruzar una alambrada, o la forma en que oye o abraza a la gente sin importar estratos sociales, lo afirman sencillamente como un ser humano. Esta es, probablemente, una de las razones de más peso que explican por qué es dueño de un 80% de aceptación.

En sus visitas a los diferentes pueblos el jefe de Estado se «codea» con los, que como él ha dicho, no pueden llegar a su despacho del Palacio Nacional, a expresar quejas o hacer algunos reclamos.

Al parecer el debilitamiento de los principales partidos de oposición, ha contribuido a que el liderazgo y el gobierno de Medina se fortalezcan, a pesar del nuevo estilo de gobernar que ha tomado.

De acuerdo a analistas políticos, la ausencia de una oposición política los errores que ha podido cometer el presidente Medina de alguna manera no se han podido capitalizar, y eso ha sido una ventaja.

Caracterizado por su puntualidad, el jefe de Estado ha consolidado su figura entre los grupos de poder y a lo interno del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), a la vez que ha generado confianza y complacencia en la gente.