BALAGUER EN SU 107 ANIVERSARIO

POR HUMBERTO SALAZAR.-

El día primero de setiembre se conmemora la fecha del natalicio de Joaquín Balaguer, a medida que pasan los años y los actores de los procesos que dieron a luz a nuestro, todavía en desarrollo, sistema democrático, el juicio sobre sus actuaciones es cada vez mas histórico y menos pasional.

Este hombre, porque era un ser humano aunque algunos se nieguen a aceptarlo, es la muestra mas acabada de como evolucionó nuestra sociedad durante todo el siglo XX.

Fue hijo de la migración catalana que vino a poblar la América, buscando suerte y fortuna, a finales del siglo XIX, existe un pueblo llamado Balaguer en el Aragón español, su padre, realizaba transacciones con el ya afamado tabaco dominicano, el cual enviaba a Europa para su comercialización.

Siendo un niño todavía, pudo vivir la invasión del país de parte de las tropas de los Estados Unidos en 1916, crear un sentimiento nacional por rechazo a esta afrenta y ser marcado por un nacionalismo que practicó durante toda su vida.

Estudió una carrera liberal, escribió en los periódicos de la época, fue rechazado por los llamados intelectuales, es un clásico su Tebaida Lírica, y se unió a la actividad política participando en la llamada ¨Revolución mas hermosa de América¨ con Estrella Ureña.

Hacemos este resumen de los inicios de Joaquín Balaguer, solo para hacer memoria de una historia que muchos no se han dignado a leer o estudiar, este hombre fue un reflejo de su época, en su vida podemos leer la historia de todo un siglo de nuestra nación.

BALAGUER EL FUNCIONARIO

Siendo muy joven y ya triunfante su proyecto político, prefirió irse fuera del país a un cargo diplomático, con el objetivo de continuar con su formación académica.

En Madrid, como Secretario de la Legación Dominicana, en vez de perder el tiempo en francachelas y tonterías, asistía como espectador a los debates de la Corte de los Diputados, donde los grandes nombres de la posteriormente malograda República, discutían el futuro de la Madre Patria.

En París, también como Secretario de la Legación, se inscribió en el curso de Economía Política de la Universidad de París, siendo cancelado por Trujillo mismo, al incluir loas a su mentor Estrella Ureña en una de sus obras literarias.

En el país, siendo reconocido por el régimen con numerosos cargos públicos, se distinguió por su vida frugal y dedicada exclusivamente a los libros y al cuidado de su madre, evitando el boato y la riqueza que acompañaron a tantos colaboradores del dictador.

Secretario de Estado, Embajador en varios países, una de las figuras de gobierno mas respetadas por Trujillo, quien se medía de maltratarlo de hecho o de palabra, puesto que Balaguer con sus actos no lo permitía.

Una anécdota que retrata la actitud de Balaguer en cuanto al respeto que exigía por mantener su buen nombre, se produjo cuando en la columna Foro Público, manejada por el dictador ,para acusar en forma anónima a sus colaboradores, se le señaló como culpable de un acto de corrupción administrativa.

Inmediatamente dictó su carta de renuncia, que le hizo llegar al llamado Jefe del país, y se puso a la disposición de la justicia para ser investigado y enviado a la cárcel, si era encontrado culpable de la calumnia que mando a escribir Trujillo en su contra.

Claro, como su conducta había sido intachable, en la misma columna se le pidió disculpas publicas, única condición que puso para volver a ocupar su cargo.

Solida formación, manejo pulcro de los fondos del estado, ejemplo de humildad y desinterés en los bienes materiales, podría ser el resumen de la vida de Joaquín Balaguer al servicio de la nación.

BALAGUER EL POLITICO

Cuando le tocó, a la caída del régimen, en su condición de Vicepresidente en funciones de Presidente de la República, encabezar la transición hacia la democracia, no dudó en asumir esa responsabilidad histórica.

Sorteando múltiples peligros, que pudieron costarle la vida, ya que fue investigado como parte del complot que provocó el ajusticiamiento de Trujillo, se dedicó en cuerpo y alma a desmantelar la estructura política y militar de la dictadura.

No importándole el poder de que disfrutaba, enfrentó a Ramfis y a la familia que se creía heredera del país, negociando con ellos su ausencia de la República Dominicana, exilio que dura hasta nuestros días.

Siendo presionado por la oligarquía, prefirió salir el mismo al exilio, dejando intacta la fortuna económica del dictador, no se manchó las manos con el oro corruptor, prefirió irse a vivir como un pobre a Nueva York, antes que ser acusado de robarse los bienes que ya eran del pueblo.

Hay que hacer notar, que los bienes de Trujillo fueron repartidos por los que sucedieron a Balaguer en el ejercicio del poder.

Los apellidos sonoros de hoy, o una gran parte de ellos, construyeron sus fortunas a partir de los restos de la dictadura, con bienes multimillonarios que debieron pasar a ser patrimonio de los dominicanos.

Nadie pudo señalar a Balaguer como corrupto, es mas, todavía se encuentra en los archivos del Banco Agrícola de la República, el contrato de préstamo y los pagos que hacia religiosamente cada mes, para saldar la deuda de la casa que le mandaron a construir en la Máximo Gómez.

BALAGUER EL PRESIDENTE

Ante la ruptura institucional de setiembre de 1963 y la división de las fuerzas armadas, guerra civil, nueva invasión de los Estados Unidos y elecciones en 1966, Balaguer fue la respuesta personal a la crisis nacional.

Creador de la clase media, de un ejercito de profesionales jóvenes que se han constituido en la clase gobernante actual, constructor de gran parte de las obras de infraestructura que hay en el país, su obra material está a la vista de todos.

Cabeza de una nación con grupos radicales armados que se dedicaron a llenar de luto y dolor a muchas familias dominicanas, supo sortear las crisis y ser un factor de equilibrio para mantener una democracia en un país acostumbrado a la dictadura.

Sus gobiernos ya pertenecen a la historia, serán juzgados por las próximas generaciones, pero sin dudas, a medida que se asientan los polvos de la pasión política, que el tiempo pone cada cosa en su lugar, es nuestra opinión que la suma de defectos y virtudes será positiva para el estadista y gobernante a quien le tocó llevar las riendas del país en la época mas aguda de la guerra fría y el enfrentamiento ideológico.

Sabemos que será juzgado por la historia en forma positiva, porque cada quien es fruto del contexto en que se desenvuelve.

Nunca se manchó, durante mas de 70 años de vida pública, sus manos, ni del oro corruptor, ni de la sangre del crimen político.

SER COMO EL

La gran discusión que mantienen algunos, la mayoría de ellos solo beneficiados de los gobiernos y el liderazgo de Balaguer, es quienes son sus herederos políticos.

Nos parece risible la discusión.

Balaguer se debe mover en su tumba, cuando algunos personeros se hacen llamar a si mismos Balagueristas.

¿Es el Balaguerismo una doctrina política?

¿Es el Balaguerismo una ideologia?

¿Es el Balaguerismo una forma de pensar?

¿Es el Balaguerismo una forma de actuar?

¿Es el Balaguerismo una forma de gobernar?

Mientras la discusión teórica sobre lo que es el Balaguerismo se desarrolla y se llegan a algunas conclusiones, quizás lo mejor sería mirarnos en el espejo de sus actuaciones.

Ser como el, significa no tenerle amor al dinero.

Ser como el, significa estar dispuestos a sacrificarnos por el colectivo aunque nos perjudique en lo individual.

Ser como el, significa la humildad y sencillez que caracteriza a los grandes hombres y mujeres.

Ser como el, significa una sólida formación intelectual.

Ser como el, significa un manejo pulcro de los dineros públicos.

Ser como el, significa no aspirar al acumulo de bienes materiales.

Ser como el, significa tener dignidad en todo el sentido de la palabra.

Ser como el, en fin es tratar que sea un ejemplo para los que a través suyo llegamos a hacer carrera política.

El mejor homenaje que se le puede hacer a Balaguer, es tratar de ser como el, un verdadero ejemplo del servidor publico.