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Chispas!

DEBEMOS HACER UN ALTO

Publicado

en

humberto salazarPOR HUMBERTO SALAZAR.-

En los países desarrollados la discusión sobre los presupuestos es la principal de la gestión de cada año de los gobiernos, es más, en los Estados Unidos es causa histórica de enfrentamiento y negociación entre el gobierno federal y el congreso de la unión.

La presentación del presupuesto del próximo año de parte del gobierno abre grandes interrogantes, sobre si usamos la estimación de los ingresos e inversión de esos recursos con una visión estratégica, o simplemente tapamos parches sin que haya una discusión profunda de las reformas necesarias en sectores básicos para nuestro desarrollo.

El tema del 4 por ciento para un sistema educativo obsoleto, populista, sin calidad, con maestros de muy bajo nivel, sin que lleguemos todavía a tener un plan de largo plazo para la mejoría de la enseñanza y el aprendizaje en temas fundamentales para el desarrollo de cualquier nación como son: matemáticas, lenguaje y ciencias.

El populismo ha impedido que se haga realidad la importación de maestros, idea refrendada por el presidente Danilo Medina, para que sirvan de facilitadores en un plan integral de mejoría de nuestra calidad educativa.

El gasto que representa el subsidio eléctrico, sin que podamos ver una luz al final del túnel oscuro de los apagones y el desorden generalizado en un sector donde muchos se hacen cada día más ricos a costa de los pocos que pagamos el servicio, es simplemente inaceptable.

El tema de la deuda que se lleva ya 140 mil millones de pesos en pago anual de capital e intereses, debe llevarnos a una profunda reflexión sobre la calidad del gasto en el tema de los préstamos internacionales.

La inversión en el sector salud, que espera por años que se ejecute la ansiada reforma planteada por la ley 42-01, es otro tema básico para una nación con un desarrollo desequilibrado, donde los ricos tienen atención médica en el primer mundo y lo pobres mueren en centros hospitalarios hacinados y deficientes.

En fin, es la hora de hacer un alto y llegar a la discusión de los pactos que prometió nuestro presidente en la campaña, la discusión temprana de los presupuestos del próximo año podría ser el marco adecuado.

MADURO NECESITA UN BUEN SIQUIATRA

Lo que esta ocurriendo con el presidente heredero del gobierno bolivariano de Venezuela es digno de un estudio psiquiátrico urgente, para diagnosticar el trastorno que seguro padece Nicolás Maduro.

A ver algunos de los síntomas; según confesó el mismo, suele irse a dormir al mausoleo donde yace el cadáver insepulto de Hugo Chávez, dizque para pedirle consejos y que lo ayude a gobernar ese desdichado país.

Confiesa que habla y duerme con un muerto; eso es un acto de necrofilia y síntomas de visión de fantasmas y escucha de voces inexistentes, compatibles con muchos tipos de enfermedades esquizoides.

Al parecer tiene también un síndrome delirante de persecución, en siquiatría esto se califica de personalidad paranoide, la cual puede clasificarse en diversos grados. dependiendo de la gravedad de la enfermedad mental.

Se va en un avión de Cubana de aviación con una delegación de 128 personas, incluyendo personajes de los cuerpos de espionaje de Cuba, en un viaje a China, con el objetivo de llegar a Nueva York a la Asamblea General de las Naciones Unidas, acompañado de una comitiva más parecida a una caravana de campaña presidencial del tercer mundo, que la visita de un jefe de estado a decir un discurso en la sede del organismo internacional.

Pues cuando le niegan la entrada a los cubanos, parece que el objetivo de Maduro era llevar ilegalmente a esta gente a territorio norteamericano, ahora dice que había un plan para atentar contra su vida.

No sabemos a quién le puede interesar matar a Nicolás Maduro, un hombre que se está enterrando todos los días con las alocadas medidas a que está sometiendo a los pobres venezolanos.

MADURO, DE CHOFER DE GUAGUA A ECONOMISTA

La herencia caótica, que desde el punto de vista económico dejó Hugo Chávez, ha estallado en las manos del actual gobierno de Venezuela.

Un país que rico en recursos naturales, bajo sus suelos esta la mayor reserva petrolera del mundo, sufre apagones, escaseces, nulo crecimiento económico y desabastecimiento de una gran cantidad de productos básicos.

Ahora, al chofer de guagua enganchado a presidente y economista, lo que se la ha ocurrido es enviar escuadrones de militantes chavistas a los supermercados ¨de la burguesía¨, para luchar contra las largas filas que se forman en estos negocios, que mantienen sus tramarías vacías, fruto de las locuras económicas de un gobierno lleno de izquierdosos de corazón pero con los bolsillos a la derecha.

El cambio oficial es de 6.30 bolívares por dólar, el paralelo es de 43 bolívares por dólar; en un país donde se ha destruido el aparato productivo nacional y casi toda la comida hay que importarla, esta diferencia cambiaría y los controles de precios, explican claramente las filas en los lugares de expendio de alimentos.

Es la ley de la mano oculta del mercado, para conocer el porqué de esta situación no hay que ser un Nóbel de economía, pero al señor Nicolás Maduro le parece que es fruto de una conspiración de un imperialismo que sólo existe en su cabeza.

Los venezolanos llenan los aviones de todas las líneas aéreas para salir de su territorio, mientras más cerca mejor.

No es porque tienen dólares para gastar en abundancia, sino, porque el límite de gastos que se cubren con las tarjetas de crédito al cambio oficial, les da y les sobra para sacar los billetes verdes de los cajeros en los países vecinos, que pagaran con la cuota asignada en la banca para estos fines, y venderlos en el mercado paralelo de su país a 5 veces lo comprado. Negocio redondo.

No se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo, el populismo impuesto por Chávez, llamado en forma eufemística socialismo del siglo XXI, no funciona, ni va a funcionar nunca porque desincentiva la iniciativa privada y premia la vagancia y el facilismo.

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