Cepeda y Cepeda dice el nacimiento República Dominicana pudo haberse originado en NY

Hablado durante una conferencia que dictara ante decenas de dominicanos en el Centro Comunitario Cardenal Bevilacqua, situado en el 2646 Norte de la avenida Kensigton en esta ciudad, el versado general dominicano expresó que Duarte, con tan solo 16 años de edad era agrimensor, sabía inglés, francés, además de gramática y teneduría de libros, y sus padres dicidieron enviarlo a perfeccionar el inglés a Nueva York, para luego proseguir a estudiar comercio a Europa.

Pero en el transcurso del viaje en el 1829 en un barco capitaneado por Jhonn Harradn Jr. y con destino a Rhode Island, durante una conversación entre ambos, el comandante insulta al joven estudiante diciéndole «tu no tienes patria, y quien no tiene patria es un paria, y quien es un paria no tiene honor».

Ese insulto, agrega el general Cepeda y Cepeda, es muy probable que llevara a Duarte a olvidarse de estudiar comercio en Europa y conciba, andando por las calles de la Gran Manzana, la formación de una república, de una nación, sostuvo.

Contó que luego Duarte continuó viaje a Hamburgo, Inglaterra, Paris y Barcelona-España, y los lugares que visitaba se iba compenetrando con las ideas y los principios de la libertad, la independencia y la soberanía de los pueblos.

Regresó a Santo Domingo en 1832 y ya en 1834 se encontraba estudiando matemáticas, dibujo y aprendiendo a tocar la flauta y la guitarra, actividades que combinaba con los contactos políticos que desembocaron en 1838 con la fundación de La Trinitaria.

En el juramento de La Trinitaria, estaban sintetizados los propósitos de la organización : «En nombre de la Santísima, Augustísima e indivisible Trinidad de Dios Omnipotente, juro y prometo por mi honor y mi conciencia, cooperar con mi persona, vida y bienes a la separación definitiva del gobierno haitiano y a implantar una República libre, soberana e independiente de toda dominación extranjera, la cual tendrá su pabellón tricolor en cuatro encalmados rojos y azules atravesados por la cruz blanca.

Los colores de la bandera los comparó con los que tiene la virgen de La Altagracia (azul, rojo y blanco) y en ellos, asegura, Duarte se inspiró porque su madre le puso una medalla de la virgen antes de salir del país. Las explicaciones que ofreció Cepeda y Cepeda en ese sentido hizo que los presentes se pusieran tan atentos que algunos de ellos secaban sus ojos en señal de llanto.

Las tareas políticas encaminadas a la expulsión de los haitianos eran ejecutadas por La Trinitaria; para la labor patriótica, pero disimulada, los trinitarios crearon en 1840 la Sociedad La Filantrópica, en cuyas actividades se pronunciaban discursos políticos, presentaban obras dramáticas y actividades culturales, siempre con la vista puesta en la educación de la juventud en las ideas de la independencia. dijo el intelectual dominicano.

Al final de la actividad, la organización sin fines de lucro «Casa Dominicana inc.» que preside el prestigioso y reconocido médico dominicano en Filadelfia, Dante Sánchez del Orbe (Danny) le entregó un pergamino de reconocimiento al general Cepeda y Cepeda, declarándolo miembro «Honorario Permanente».