RUBÉN SILIÉ VALDÉZ: TRAIDOR A LA PATRIA

POR HUMBERTO SALAZAR.-

La sentencia del Tribunal Constitucional que ordena a los poderes públicos poner orden al tema migratorio, ha hecho que algunos traidores ocultos se hayan tenido que quitar las caretas.

El Embajador de la República Dominicana en Haití, el señor Rubén Silié Valdéz, es definitivamente uno de los que asume la causa haitiana con vehemencia y bajo los argumentos raciales que esgrimen los defensores de la isla única e indivisible desde el siglo XVIII.

En una conferencia ante la Asociación Mundial para el Estudio de la Diáspora Africana, los conceptos emitidos por el embajador, ¿dominicano o haitiano?, se alinean perfectamente con la posición histórica de los intelectuales haitianos, en el sentido de que los descendientes de españoles que habitamos la parte este de la isla practicamos el racismo.

Para Silié, según sus palabras, de forma textual: ¨no podemos saltar el racismo porque lo negamos, si negamos que tenemos un lenguaje y una practica racista vivimos en un estado de alienación sicótica¨.

PARA SILIÉ SOMOS ALIENADOS- SICÓTICOS

El traidor a la patria que tenemos como embajador en Haití, nos declara alienados y sicóticos.

No se conforma con decir que los dominicanos somos alienados, es decir que tenemos serios problemas para identificarnos nosotros mismos, que existen dentro de nuestro pensamiento colectivo y social serios problemas para aceptarnos; con esto apoya la acusación de ¨bovarismo colectivo¨con que nos acusó Jean Price Mars, el intelectual haitiano que es el autor de cabecera de las élites haitianas.

No sólo somos alienados, según dice Silié, a este calificativo, a todos luces peyorativo para nuestro país, le agrega una patología mental que agrava nuestra situación; somos alienados sicóticos.

Este término utilizado por la ciencia médica describe un individuo, que no solo sufre de una tendencia hacia el no reconocimiento de si mismo, de su entorno, sino que en la forma mas radical de su alienación, se aísla del mundo exterior, ya que, ni siquiera reconoce los objetos que lo rodean o las personas de su entorno.

Para aterrizar el lenguaje y usar palabras que todos podamos entender, el alienado psicótico es el loco que conocemos.

Para el señor embajador, los dominicanos somos todos como el Dr. Anamú, que caminaba por las calles de la ciudad intramuros dando recetas, o el Cienciólogo de la UASD, que conocía los detalles de todo el conocimiento humano.

ADEMAS SOMOS RACISTAS

Dice el embajador textualmente: ¨que en RD se practica el endoracismo, racismo en contra de si mismo¨.

Agrega: ¨El trujillismo se cuidó de hacernos creer que descendemos de la Madre Patria, nosotros, refiriéndose a los afroamericanos, aquí no existimos.

Según el su familia llegó de Curazao en 1929 y ¨que es posible que la resolución del Tribunal Constitucional declare que tampoco su familia es dominicana.

Se da el lujo el señor embajador, de criticar en un foro internacional las decisiones de su propio gobierno y de las instituciones que; como las del Tribunal Constitucional, obligan a todos los poderes públicos a cumplirlas, ya que son vinculantes según nuestra Constitución y que el juró cuando asumió el cargo defenderlas y respetarlas.

No solamente racistas, también explotadores de la mano de obra esclava, primero de la parte francesa de la isla y después de los haitianos, trasluce su convencimiento de que el progreso que hemos tenido frente al desastre económico ocurrido en la parte oeste de la isla, es culpa de nuestra condición de esclavistas, cuando dice: ¨a finales del siglo XVIII la parte Este de la isla era de mayoría mulata: todos los blancos eran jefes y todos los negros eran sirvientes. El prejuicio era muy fuerte¨.

Parece que el prejuicio no era tan fuerte, decimos nosotros, porque los blancos se mezclaban con los negros y producían la variedad del color de la piel que caracteriza a la mayoría de los dominicanos.

TUERCE LA HISTORIA EN CONTRA NUESTRA

Lo cierto es que el señor Silié Ruíz debería leerse ¨Composición Social Dominicana¨de Juan Bosch, ¨La esclavitud del negro en Santo Domingo¨ de Carlos Esteban Deive y ¨La Revolución haitiana y Santo Domingo¨ de mi profesor de historia en la UASD, Emilio Cordero Michel.

Porque la verdad histórica demostrada es que el cambio económico que se produjo en la parte Española de la isla, a partir de tres hechos fundamentales: el escasez de oro y plata, el inicio de la conquista de Mexico y el Perú y el abandono de la producción intensiva de la caña de azúcar, a partir de la desaparición del mercado, para sustituirla por los hatos ganaderos, devino en una relación amo-esclavo diferente a la que se producía en Saint Domingue y otras colonias inglesas y francesas.

En una descripción de la situación de la parte española de la isla, tomada del libro de Emilio Rodríguez Demorizi: ¨Viajeros de Francia en Santo Domingo¨, Vincent un militar francés dice lo siguiente: ¨La mayoría de los habitantes de la parte española, son en efecto, hateros o propietarios poco ricos, los cuales no tienen más que un pequeño número de negros con quienes comparten penas y alegrías en sus trabajos comunes. Es sobrada verdad decir que ya sólo queda entre ellos la palabra esclavitud. Pero esta palabra representa todavía un peso enorme a los ojos tanto del amo como del esclavo. Ello hace que este último, impulsado y constreñido al hábito de la labor cotidiana, ejecute con precisión y aparente buena voluntad lo que su amo, hombre sumamente brutal, no dejaría de exigirle por la fuerza, si dudase un momento de su sumisión.

Y también Emilio Cordero Michel , describe la condición de la parte española de la isla en el siglo XVII cuando dice: “Por otra parte, la particular forma de producción del Santo Domingo Español, afianzada en el hato y en la explotación pecuaria, originó que las relaciones de producción, aunque continuaran descansando básicamente en el trabajo esclavo, sufrieran ciertas modificaciones motivadas, sobre todo, por las condiciones mismas en que se realizaba el trabajo. Las relaciones de producción existentes entre el amo hatero y los vaqueros esclavos determinaron que estos últimos recibieran un trato distinto al que se daba a los esclavos de las plantaciones de azúcar, café, algodón, cacao, etc., de la antigua colonia francesa de Saint-Domingue (…).”14

Y Juan Bosch, cuando describe la situación de la parte Este de la isla a finales del siglo XVI: ¨“Por otra parte, la particular forma de producción del Santo Domingo Español, afianzada en el hato y en la explotación pecuaria, originó que las relaciones de producción, aunque continuaran descansando básicamente en el trabajo esclavo, sufrieran ciertas modificaciones motivadas, sobre todo, por las condiciones mismas en que se realizaba el trabajo. Las relaciones de producción existentes entre el amo hatero y los vaqueros esclavos determinaron que estos últimos recibieran un trato distinto al que se daba a los esclavos de las plantaciones de azúcar, café, algodón, cacao, etc., de la antigua colonia francesa de Saint-Domingue (…).”14

Simplemente el embajador Silié Valdéz, desnuda su posición antidominicana cuando contradice a todos nuestros historiadores y asume la posición de los descendientes de esclavos negros del Caribe, que han construido un frente común para que la República Dominicana cargue oficialmente con toda la población haitiana.

¿PORQUÉ TRAIDOR A LA PATRIA?

Aquí simplemente usaremos el diccionario, Traición: renegar con dichos o acciones (sean estas voluntarias o involuntarias) un compromiso de lealtad hacia una idea, asociación o grupo de pertenencia.

Traición significa una conducta desleal hacia la nación.

Pensar o difundir ideas al orden establecido por el Estado.

Patria: del latín familia, padre; suele designar la tierra natal o adoptiva a la que un individuo se siente ligado por vínculos de diversa índole, como afectivos, culturales o históricos o lugar donde se nace. Se denomina patriotismo al pensamiento o sentimiento que vincula a un individuo con su patria.

(ambas definiciones tomadas de Wikipedia).

Entonces, si Rubén Silié Valdéz, no se identifica con los mismos sentimientos culturales, de pertenencia que tenemos los que nos comunicamos en lengua española, practicamos la religión cristiana en todas sus vertientes y nos consideramos descendientes de mulatos, en una sociedad donde el esclavismo desapareció en la práctica hace mas de cuatro siglos, quiere decir que no puede ser nuestro representante, ya que, no reconoce a la República Dominicana como su patria y práctica la simulación cometiendo un acto de traición a quien dice representar y defender.