Sus batazos contribuyeron a darle un campeonato al equipo con sede en Santiago, ciudad a la que vuelve transcurrida más de una década; otra vez, con el mismo reto de ganar, pero en rol diferente: el de dirigente.
El norteamericano arribó antier por la tarde al país y, ayer en la mañana, estuvo al frente de unos concurridos entrenamientos de las Águilas Cibaeñas, conjunto que espera conducir por el sendero que los lleve a la corona 21.
“La mejor sensación en béisbol es ganar un campeonato y para lograr eso estoy aquí”, dijo Barkett, quien viene de obtener el título en la Liga del Sureste con el equipo Jacksonville Suns, sucursal doble A de Miami Marlins.
Dijo que no viene al país para añadir números a su hoja de vida como dirigente, sino, a ganar un campeonato.
“No me ha traído a República Dominicana el tratar de ganar dinero, ni tampoco el hecho de querer “mejorar mi curriculum” para que esto me ayude a avanzar dirigencialmente en Estados Unidos; lo que busco es ganar un campeonato para las Águilas, porque tengo un corazón aguilucho”, afirmó.