Cennect with us

Opiniones

Respuestas y cuentas claras con y de parte de la Policía Nacional

Publicado

en

Por Lic. César Fragoso.-
La Policía Nacional ha dicho que ya solucionó dos de los cuatro casos de asesinatos reportados en los últimos seis meses, ya que la semana pasada se entregó el matador de Kary Katherine Henríquez, de 23 años de edad, y que también está resuelto el de la muerte de la niña de 13 años, Vianela Reynoso Amparo.
De igual manera la Dirección policial, a través de su vocero, dijo que tiene detenida una persona que podría ser el culpable de las muertes de otras dos jóvenes cuyos cadáveres fueron encontrados en los alrededores del faro a Colón.
Si bien es cierto, que la posible solución de estos lamentables sucesos da cierto respiro a la población, no menos cierto es, que existen innumerables hechos criminales que aún están sin resolver.
Nuestra Policía Nacional ha demostrado que tiene excelentes investigadores que, cuando se lo proponen, resuelven con bastante rapidez los más complejos casos que se les presenten y que envuelven crímenes, violaciones sexuales, desapariciones, supuestos secuestros de personas, incendios intencionales de viviendas, atracos a turistas, robos a negocios, etc, etc.
Dos de los más sonados hechos acaecidos el año pasado y que fueron resueltos como por arte de magia, fueron el atraco a la defensora del Pueblo, la Dr. Zoila Martínez, a quien le robaron su vehículo y mantuvieron secuestrada por unas horas y, el relacionado con la banda que dirigía Percival Matos cuyo accionar puso en vilo a todo el país y que terminó con la muerte de su principal coordinador cuando fue detectado por la policía en un motel del interior del país.
Este último caso en particular llamó mucho la atención de la ciudadanía pues, a pesar de que todos sabíamos quién era el cabecilla de la banda, la Policía no lo encontraba por ningún lado y, hubo que hacer casi una declaración de emergencia nacional en la que intervino el propio Presidente de la República, para que se diera con el paradero y posterior muerte del ex teniente Percival Matos.
La verdad hay que decirla, en manos de la Policía Nacional descansa la seguridad ciudadana de un país donde últimamente la delincuencia se ha incrementado considerablemente y, donde, en el devenir de los años, nuestros policías no han sido equipados adecuadamente para combatirla.
Si nos vamos a su historia, veremos que el cuerpo policial es el resultado de la primera ocupación norteamericana en nuestro país de 1916 a 1924, cuando las tropas invasoras crearon una Institución militar denominada como ‘’Guardia Nacional’’, cuerpo castrense que funcionaba como agencia de defensa y policía y que sentó las bases de la actual Policía Nacional.
En noviembre de 1930, el Congreso le da la potestad al Presidente de la República Dominicana para nombrar y destituir jefes locales de policía y es en marzo del 1936 cuando se crea la Fuerza Nacional de Policía tal y como es hasta el día de hoy.

Desde la fecha de su formación, hasta nuestros días, la Policía Nacional Dominicana ha ido cambiando considerablemente y profesionalizándose, no sin antes pasar períodos de malos recuerdos para la ciudadanía, como es el caso de los 30 años de la tiranía trujillista durante los cuales eran el órgano represivo de su nefasto Gobierno.

También fue usada como un elemento de control para los adversarios del Dr. Joaquín Balaguer durante sus primeros 12 años de mandato, los cuales inició luego del país haber pasado por la Revolución del 1965, habían muchas armas en manos de la población civil y, para la ocasión, la Policía tenía que reprender con fuerza a quienes se atrevían a manifestarse en contra del Gobierno.

Ese pasado represivo por parte de nuestra Policía, el hecho de que en sus filas existen algunos efectivos que aprovechan su condición para cometer actos delictivos, unido a los bajos sueldos y pocos beneficios que por año han afectado a sus miembros, muchos de los cuales acuden al macuteo para completar sus ingresos, fueron creando una desconfianza generalizada de la población hacia el cuerpo policial, llegando al extremo de que se irrespeta su autoridad y, son muchos los que dicen tenerle miedo a sus miembros pues piensan que estos los pueden atracar.

A pesar de los grandes esfuerzos que han hecho algunos Jefes policiales, hoy denominados Directores, aún es mucho lo que falta por hacer para que la ciudadanía entienda que puede confiar en la Policía y valore sus servicios.

No podemos olvidar que, a pesar de todo lo que se pueda decir en su contra, son los policías los que nos cuidan de la delincuencia.

Debemos estar conscientes de que la mayoría de sus integrantes son hombres y mujeres serios que se preocupan por hacer adecuadamente su trabajo, el cual realizan bajo condiciones que deben seguir siendo mejoradas.

Yo entiendo que una manera de proteger las vidas de los policías y militares que son asesinados para robarles sus armas de reglamento es exigirles que, cuando no estén de servicios, dejen sus armas de reglamento en los cuarteles.

Esta medida también podría ayudar a disminuir la delincuencia pues, aquellos malos policías o militares que las usan para delinquir, no podrían hacerlo.

Esa medida unida al verdadero inicio del desarme de la población civil, ayudaría también a menguar la situación de inseguridad que hoy vivimos.

Nos corresponde a todos exigir al Director de la Policía que profesionalice cada vez más a sus integrantes y que tome las medidas que sean necesarias para que haya una profilaxis en sus filas donde sean eliminados los que no se merecen llevar su digno uniforme.

Igualmente la ciudadanía debe demandar del Gobierno una mejor atención a todo lo relativo a la mejoría significativa que tanto en sus ingresos mensuales como en otros beneficios colaterales muy bien se ganan a diario por su trabajo.

Ya es tiempo de que tengamos respuestas y cuentas claras con y de parte de la Policía Nacional

Publicidad