“A falta de pan, casabe”, dice el refrán. Para gran parte de la población consumidora, ni esa posibilidad cabría. Ese artículo está sumamente encarecido. El presidente Danilo Medina, que visitó a productores de casabe de Monción para asistirlos técnica y financieramente, debe estar consciente de que su bien intencionado apoyo se les traducirá en prosperidad sólo en función de que la gente consuma suficiente casabe. Yo acostumbraba a adquirirlo frecuentemente, ahora sólo de manera muy esporádica, forzada a hacer ahorros. Sirva el botón de muestra para apreciar el engranaje de la economía, que se activa en función del consumo. Las autoridades que auxilien a los productores y paralelamente devuelvan poder adquisitivo al pueblo.