Uno de los clásicos de la literatura universal es el libro de Jonathan Swift que narra las aventuras de Lemuel Gulliver, quien en diversos viajes por mundos desconocidos describe su relación con seres extraños y animales inteligentes, participando de la vida de estas sociedades imaginarias en las que, el autor, realiza una crítica rabiosa al mundo que le tocó vivir.
El libro fue escrito en 1726 en pleno reinado de Jorge I de Inglaterra.
Quizás de las cuatro partes en que se divide el libro, cuyo título original es: ¨Viaje a algunas remotas naciones del mundo, en cuatro partes. Por Lemuel Gulliver, primero Cirujano y después Capitán de varios barcos¨; la mas conocida es la aventura que tuvo el protagonista al naufragar y llegar a la tierra de los Liliputienses.
GULLIVER EN LILIPUT
Llegado a la costa de Liliput, casi muerto después de naufragar su embarcación, Gulliver descubre que sus habitantes son doce veces mas pequeños que él, a pesar ser seres humanos, normales y corrientes.
Es decir, Gulliver se convierte en un gigante en tierra de pequeños.
Después de las primeras sorpresas para la convivencia entre el gigante y lo pequeños, participa como uno mas de la corte deL rey de Liliput, a sabiendas de que su condición de gigante le daba ciertas ventajas y muchas desventajas en este mundo nuevo y diferente.
Toma parte en la confrontación contra los eternos enemigos y vecinos de los liliputienses, los blefuscudianos, a quienes roba su flota de barcos de guerra y deja en situación de indefensión.
Cuando el rey le pide que ayude a convertir a Blefuscu en una provincia de Liliput, Gulliver se niega, lo que lleva al rey mandar a apresarlo y condenarlo a sacarle los ojos como castigo por no cumplir con sus deseos.
En la historia Gulliver logra huir hacia Blefuscu, donde se apodera de un bote abandonado, se hace a la mar y vuelve a su hogar.
CANCIÓN PARA GULLIVER
Un dia
los enanos se rebelarán
contra Gulliver.
Todos los hombres de corazón diminuto
armados con palos y con hoces
asaltarán al único gigante
con sus pequeños rencores, con su bilis,
con su rabia de enanos afeitados y miopes.
Pobre de tí, Gulliver, pobre de ti,
el día en que todos los enanos
unan sus herramientas y su odio,
sus costumbres, sus vicios, sus carteras,
sus horarios. No podrán, no podrán,
no podrán perdonarte que seas alto.
Para ellos la generosidad no es mas que un lujo que no pueden pagarse,
viven alimentados por la envidia que los habita en forma de costumbre.
Míralos revolverse recelosos tras sus gafas de concha.
Te acusarán, te acusarán, te acusarán:
de ser el tuerto en el país de los ciegos,
de ser quien habla en el país de los mudos,
de ser el loco en el país de los cuerdos,
de andar en el país de los casados,
de ser sabio en el país de los necios,
de ser el malo en el país de los buenos,
de divertirte en el país de los serios,
de estar libre en el país de los presos,
de estar vivo en el país de los enanos,
de ser la voz que clama en el desierto,
de ser la voz que clama en el desierto.
Autor: Joaquín Sabina
Cualquier parecido con lo que ocurre en la República Dominicana con los que destacan sobre los demás, no es ninguna coincidencia, es que somos un país de liliputienses, donde no se perdona el éxito y los talentos ajenos.