Cennect with us

ECONOMIA

Empresario Hidalgo califica de atropello orden de arresto en su contra

Publicado

en

ECONOMICAS.- Juan José Hidalgo.- Fuente ExternaEl presidente de la empresa Globalía, Juan José Hidalgo, dijo este viernes que recibió con estupor el auto de detención por no haber compadecido ayer a un juicio en la provincia La Altagracia, ya que ni siquiera había recibido la citación.

El empresario Hidalgo dijo que es un empresario que ha demostrado honestidad, rectitud y respeto durante su larga trayectoria profesional, por lo que se siente absolutamente ultrajado por todos los incidentes relativos a este proceso y aseguró que exigirá responsabilidades a las personas y instituciones que están tratando de desprestigiar su reputación, imagen y honorabilidad.

El propietario de la línea aérea Air Europa y con inversiones en resorts en Bávaro, calificó de atropello que un juez dominicano le ponga en busca y captura por no presentarse a un juicio al que no fue citado.“Espero que las autoridades del país tomen nota de este atropello”.

Agregó que “a los evidentes disparates que acumula este proceso, viene a sumarse ahora la decisión del juez Andrés Rijo Delgado de dictar orden de busca y captura contra alguien que ha comparecido infinidad de veces ante su juzgado y ha tenido que volverse a casa en otras tantas ocasiones porque se suspendía la vista. En esta ocasión, ni siquiera había recibido la citación”.

Hidalgo agregó que “de esta forma, el proceso viene durando ya cuatro años, con constantes idas y venidas y con el consiguiente desgaste” para el empresario español, que califica de “chantaje” la demanda, dice un documento del empresario español entregado por Ramiro Campos Gallego, director de asesoría jurídica de Inversiones Bávaro.

Explicó que en una primera vista, la justicia falló a favor de Hidalgo, pero los abogados de Sandalio Suárez instaron un nuevo juicio en el mismo tribunal.

El documento señala que el juicio al que Hidalgo no acudió por no recibir la citación, arrastra una larga historia de despropósitos y está basado en la reclamación del ciudadano cubanoamericano que dice ser propietario de un trozo de playa de 600 metros cuadrados en un país donde las playas son de titularidad pública.

Publicidad