En rueda de prensa, el portavoz de la cancillería, Steffen Seibert, auguró que serán complicadas las conversaciones y negociaciones que deben iniciarse entre la UE y Suiza después de que la mayoría de los votantes apoyara las cuotas para la inmigración.
«Nuestro interés debe ser proteger una relación lo más estrecha posible entre la UE y Suiza», añadió el portavoz de Merkel.
En opinión de Berlín, tienen que ser las autoridades suizas quienes se dirijan a Bruselas para explicar y aclarar cómo aplicarán el resultado del referéndum.
En respuesta a una iniciativa denominada «Contra la inmigración en masa», los suizos apoyaron ayer en referéndum establecer cuotas anuales para los ciudadanos de la UE, que deberán aplicarse de aquí a tres años
El resultado hará inevitable una renegociación del acuerdo bilateral entre Suiza y la UE sobre la libre circulación de personas, en vigor desde 2002 y que se aprobó también en un referéndum dos años antes.