Montás asume compromiso de combatir inequidad femenina

El ingeniero Temístocles Montás proclamó la noche de este jueves ante cientos de mujeres que apoyan sus aspiraciones presidenciales por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que mientras en el país haya inequidad femenina jamás habrá desarrollo, felicidad ni paz.

“Pero sueño y aspiro a que la mujer dominicana viva libre, educada, capacitada, que disfrute la vida en igualdad de oportunidades respecto a los hombres”, auguró Montás durante el lanzamiento del Movimiento Mujeres con Temo, un acto en el que tomó el juramento a cientos de damas que jurararon luchar por su nominación presidencial en el 2016.

En la apertura del encuentro hablaron la doctora Ysabel Lara, Coordinadora Nacional del Movomiento femenino; la licenciada Hortesia Alvarez, dirigente en la capital quien tuvo a su cargo la presentación de Montás; así como Jáquez y la ingeniera Elsa Acosta.

Con un salón repleto de mujeres procedentes de diferentes puntos del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, Montás recordó que la población del país es de casi diez millones de habitantes y que cerca de la mitad son mujeres, por lo que no puede haber desarrollo cuando el 50% padece inequidad económica, política y social.

Montás fue el orador principal en el acto convocado en el hotel Dominican Fiesta por la celebración este 14 de febrero del Día de la Amistad, a propósito de lo cual disertó sobre “La Mujer, la Igualdad y el Desarrollo en la República Dominicana”.

Lamentó que pese a algunos avances, en el país persisten barreras como el que de cada diez hombres en edad de trabajar hay seis laborando y de cada diez mujeres sólo tres.

Citó que el 90% de los empleados del sector servicio son mujeres y en el sector industrial sólo el 7%, mientras que la tasa de desempleo femenino es de 23.1% y la masculina 9.7% en 2013.

Montás citó también que si bien la esperanza de vida de las mujeres ronda hoy en día los 74 años de edad, «o sea que duran más que los hombres, resulta que en este país, para dolor y vergüenza de todos, la mortalidad materna es muy alta: 106 defunciones maternas por cada 100 mil nacidos vivos”.

Explicó que en gran medida esto está asociado a que una de cada cinco adolescentes, entre 15 y 19 años, ya es madre o está embarazada. “Y para colmo, resulta que esta cifra se triplica, pues seis de cada diez, están entre las mujeres más pobres y menos educadas”, resaltó.

El también Ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, observó que otro grave problema a encarar en el país es la violencia de género, pues las estadísticas revelan que una de cada 5 mujeres mayor a los 15 años ha sido víctima de violencia física, en tanto que en los últimos 5 años alrededor de 200 mujeres en promedio han sido víctimas de femenicidios.

También se sabe, citó el dirigente peledeísta, que entre las mujeres mayores de 19 años que reportaron haber sido agredidas sexualmente la mayoría fue violada por primera vez cuando tenía entre 15 y 19 años”.

No obstante, reconoció que la mujer ha estado ganando espacio en los últimos años al grado de que su presencia en las universidades es superior en un 44 por ciento al de los hombres, en tanto que su participación a nivel político igualmente esta siendo cada vez más notorio.

“La verdad es que, por lo visto, todavía hay mucho trecho por recorrer, con las mujeres hay que contar; sin las mujeres no hay desarrollo”, sentenció Montás, al deplorar que una de cada cinco mujeres mayores de 15 años han sido víctima de violencia física en algún momento de su vida.

Montás proclamó que “esto, todo esto, queridas amigas, es un desperdicio de desarrollo. Son las grandes heridas que sangran el desarrollo de la mujer, que sangran el desarrollo de la República Dominicana”.

A seguidas anunció que tiene el compromiso con una agenda de país que supere esa desigualdad y abordar en primer lugar la inclusión económica como necesidad de elevar la participación de la mujer sobre todo en sectores no tradicionales.

En segundo lugar citó la inclusión social o necesidad de atacar las diferencias de género en salud, violencia social, pobreza y desigualdad y una inclusión política mayor con relación a la del hombre.

En ese sentido Montás abogó por más y mejores políticas públicas que garanticen la integridad física de la mujer, por más y mejor educación en salud y salud sexual y reproductiva y por una reducción del embarazo en adolescentes que, según dijo, atentan contra el propio desarrollo femenino.

En el plano político, se refirió al desarrollo institucional como sostén de la democracia sustentada en la alternabilidad en el ejercicio del poder, con el objetivo de reiterar su rechazo al continuismo que según previno lleva a algunos políticos “a creerse imprescindibles e insustituibles”.

“La historia nuestra de solo décadas atrás nos da lecciones de que el continuismo no deja buenos beneficios para el desarrollo. Mas bien, perjudica el desarrollo institucional, político y social del país, por eso impulso una cruzada anticontinuista en el PLD”, declaró.