Gobierno expone en ONU avances y retos del país en temas de población y desarrollo

NUEVA YORK, Estados Unidos.- El gobierno dominicano aseguró que aunque en el país todavía hay muchas brechas por cerrar, han mejorado las condiciones de vida de la población en general, en su informe ante la 68 Comisión de la Conferencia de Población y Desarrollo de Naciones Unidas en Nueva York, dado a conocer este lunes por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD),

El viceministro de Planificación, Juan Tomás Monegro, expuso entre otros temas de la conferencia sobre la reducción de la pobreza y las desigualdades de género, promoción de la salud y derechos reproductivos, equidad de género y empoderamiento de las mujeres, inclusión y atención a adolescentes, niños y niñas y la familia en general.

Manifestó el beneplácito del gobierno por el tema de la Conferencia: “Realizando el futuro que queremos”, y expresó su apoyo a las posiciones sobre estos temas del G-77+China, de la OACI y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).

“En mi país hay todavía mucha brecha por cerrar, pero hay progresos apreciables, pues hoy son más reconocidos y ejercidos los derechos de la mujer en general; la equidad de acceso a la educación ha sido alcanzada; los derechos de salud y reproductivos se han extendido, y alcanzan cada vez más a mujeres en situaciones de vulnerabilidad”, expresa el informe, en nota de la Unidad de Comunicaciones del MEPyD.

Monegro citó el avance significativo en el respeto a la mujer y en equidad de género, el cual ha favorecido objetivos de empoderamiento, como el acceso a servicios de salud, protección social y reducción de la vulnerabilidad de la mujer.

“Sin embargo –subrayó el viceministro- persiste una considerable brecha salarial, y la violencia de género y de hogar sigue siendo una afrenta al desarrollo al que aspiramos”.

Recordó el pacto nacional por la calidad de la educación suscrito en 2014 entre el gobierno y la sociedad, que incorpora entre otros acuerdos al currículo educativo desde la primera infancia y con las estrategias pedagógicas adecuadas en todos los niveles.

Asimismo la educación sexual-reproductiva, el conocimiento y prevención de las infecciones de transmisión sexual y VIH, como también la formación en valores de respeto, igualdad y equidad de género.

“Confiamos en que los programas y las políticas públicas derivados de este pacto contribuirán a diminuir la alta tasa de embarazo adolescente, así como las tasas de mortalidad materna e infantil, consideradas entre las más altas de la región América Latina y el Caribe”, auguró el viceministro.

También informó sobre la modificación al Código Procesal Penal que despenaliza el aborto terapéutico cuando la madre corre peligro y se agoten los procedimientos técnicos y científicos de lugar.

“Nos complace informar esto porque es un logro en línea con los objetivos y metas de la Agenda de El Cairo”, la cual supuso en 1994 un cambio en la visión del desarrollo y en las políticas de población, para que ésta dejara de centrarse por vez primera sólo en datos o en números y pusiera como centro de la discusión al ser humano.

El viceministro dijo que esa agenda adoptada por 179 países supuso para la República Dominicana permear su marco normativo y políticas públicas, al contribuir a elevar la conciencia ciudadana sobre temas relevantes del desarrollo.

Como ejemplo de ello citó la Constitución reformada en 20190 y la visión a 2030 de la Estrategia Nacional de Desarrollo, cuyos objetivos, metas y líneas de acción son consonantes con los del desarrollo sostenible, incluido el enfoque poblacional, sus libertades y derechos.

“En el Plan Plurianual del Sector Público se integran de manera continua políticas, programas y proyectos que impulsan los resultados con enfoques de desarrollo sostenible y vinculados al espíritu de la Agenda de El Cairo”, observó.

Al referirse a las brechas pendientes de cerrar para avanzar el país, el viceministro informó que a pesar de que el país ha tenido crecimiento alto y sostenido en los últimos veinte años, el desempleo y el empleo precario es alto también y 36% de los dominicanos y las dominicanas subsisten por debajo de la línea de pobreza y el 8% padece la pobreza extrema.

“Nos preocupa sobremanera la incertidumbre que embarga o aguarda a millones de jóvenes, adolescentes y niños y niñas de nuestro país que buscan o buscarán, más temprano que tarde, un empleo como medio para realizarse como personas y vivir con dignidad, y que en el contexto y condiciones actuales muchos no lo encontrarán”, lamentó.

Monegro agregó que en estos momentos cinco de cada adolescente es madre o ha estado embarazada, fenómeno que definió como daño al desarrollo, por ser éste un vector clave de perpetuación de pobreza que además repercute en los ya elevados índices de mortalidad materna e infantil y causa estragos a la salud emocional personal y familiar.

“Pero el gobierno dominicano moviliza esfuerzos de política procurando la reversión de estos resultados. La universalización de accesos a educación sexual y a servicios de salud sexual y reproductiva con calidad y calidez, comprensividad e integralidad, son cruciales para encarar estos desafíos”, reconoció el viceministro.