Prudencia, madre de una buena estadía y buen retorno

Por Petra Saviñón.-

En uno de los países con las carreteras más peligrosas del mundo, los accidentes de tránsito ya han sido normalizados y asumidos como una constante que aunque preocupa, no espanta.
Así, no es raro encontrar los lunes el balance del fin de semana y de largos asuetos como este, periodos en los que aumentan, pero igual a diario ocurren.

El gran grueso lo componen jóvenes, la mayoría en motocicletas y bajo el influjo del alcohol. Una verdadera lástima, porque cada vida perdida de ese modo deja una estela de dolor más fuerte.

En esta época con tantos días para disfrutar, es común el consumo excesivo de bebidas espirituosas, la adrenalina que impulsa la prisa, el arrebato, el sinsentido. En tono positivo es bueno pensar que las cosas serán distintas para mejor, que el disfrute será pleno y sin contratiempos, que todo estará bien manejado.

Esa energía de buenaventura nos inunde y logre que todos los que optaron por quedarse en las zonas que habitan saquen el mayor beneficio a esa decisión y que los que viajaron retornen todos.

Incluso, si alguien desea incrementar el número y traer a otra persona en el vientre, es válido.

Buenas pascuas para los creyentes, buenas vibras para el resto.