Luis Abinader y el futuro

Por Milton Olivo
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Dios es testigo, que República Dominicana vive una Era de cambio. El nacer una nueva RD basada en la honradez administrativa. Y el agonizar de la vieja RD, basada en la corrupción como sistema. Es sepultar una cultura de 5 siglos, normal que muchos duden sea posible. Es el legado de Luis Abinader.

El presente, similar a las semanas posteriores al Trabucazo de 1844, las fuerzas que se beneficiaron del pasado, se reagrupan, para defender sus intereses, y tratar de retomar el control del Estado. El presidente hace su trabajo, el patriotismo de los ciudadanos debe hacer el suyo.

Hay muchos futuros posibles. Todo depende de la correlación de fuerzas. La presidencia lucha contra enemigos internos y externos. La prudencia dicta evitar dividir fuerzas. Si no concentrarla en el punto más neurálgico y trascendente. En el presente, establecer la honradez pública

Muchos, por ignorancia, por manipulación, por ser inconscientes históricos, o por espíritu de partido, se ponen contra los intereses de la patria, y se convierten en defensores de sus propios verdugos. Y eso tiene números; 38% de votantes del PLD en las pasadas elecciones.

El presente de cambio y de establecer el imperio de la Ley en el país, manda a todo verdadero ciudadano, enfocar sus pensamientos y actos, en función de una sola bandera, la tricolor, y una sola causa, la causa de la patria. Para beneficio de las presentes y futuras generaciones.

Con el corte a la corrupción, la sociedad dominicana comenzará a mejorar el clima de negocios, y en la medida que se incremente la creación de empleos, en esa medida se reducirá la influencia de los partidos tradicionales pues históricamente han funcionado como agencia de empleos.

El autor es precandidato a Alcalde de SDE