La limpieza espiritual: el rostro de la solidaridad

POR J. LUIS ROJAS
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A juzgar por lo que se percibe, por los continuos mensajes que se difunden y comparten a través de los medios tradicionales y digitales de comunicación, así como por las distintas redes sociales, parecería que el panorama social, político y económico de República Dominicana, está rodeado de energía negativa. Además de los factores mencionados, hay que agregar los de origen exógeno: crisis de liderazgo global, resurgimiento de los conflictos bélicos, presencia de nuevos dictadores, discordias entre el comportamiento del neoliberalismo y el rol del Estado, crisis humanitaria, efectos negativos del calentamiento global y el cambio climático, entre otras variables que ponen en riego las diferentes dimensiones de la vida (humana, vegetal y animal)

Como dirían los profesionales de la sociología y psicología: “la atmosfera social y política dominicana actual, está cargada de energía negativa”. Desde los últimos meses de 2023, hasta la fecha de hoy, han ocurrido eventos y situaciones que, sin lugar a duda, perturban la tranquilidad y buena convivencia de segmentos importantes de los ciudadanos que residen en determinadas localidades del país. Entre los hechos que más energía negativa han agregado al ambiente actual, se destacan los siguientes:

• Explosión en la fábrica Vidal Plast (agosto de 2023), en el centro de la ciudad de San Cristóbal, en la que murieron 42 personas.

• El Gobierno dominicano cierra sus fronteras con Haití, debido a la construcción irregular de un canal de riego en el río Masacre (septiembre, 2023). La inestabilidad política, la violencia extrema protagonizada por pandillas que controlan grandes zonas del país, la pobreza, los efectos de los desastres naturales, la falta de liderazgo transformacional, entre otros factores, influyen en la estabilidad de las relaciones entre ambos países.

• El incidente en el que murieron varios niños y jóvenes y otros recibieron quemaduras de segundo y tercer grado, en un incendio ocurrido durante el cierre del carnaval de Salcedo (marzo, 2024)

• Los dimes y diretes de los que perdieron y ganaron en las recién pasadas elecciones municipales, en las que se eligieron a los funcionarios de los gobiernos locales de RD., (febrero de 2024).

• El activismo en los tribunales de justicia, en los que desde el 2021 se juzgan a funcionarios públicos del gobierno pasado, por corrupción y soborno. Por ejemplo, el sonado caso Operación Medusa, contra el exprocurador Jean Alain Rodríguez y más de 60 personas físicas y jurídicas.

• El alto costo de la vida afecta la capacidad de los hogares de bajos ingresos para satisfacer sus necesidades básicas y obtener bienes y servicios esenciales. Además, está provocando que segmentos importantes de la sociedad dominicana, no puedan disfrutar de buenos servicios públicos básicos: salud, energía eléctrica, seguridad ciudadana, agua potable, recogida de basura, entre otros.

• La falta de planificación del tránsito y el transporte terrestre está enfermando física y emocionalmente a un número importante de los dominicanos. Al respecto, el Dr. José Miguel Gómez, ha dicho que: “En un país caluroso, con pocos espacios recreativos y tapón permanente, más la imprudencia y la falta de educación ciudadana, es lo que provoca conflictos, desafío a la autoridad, peleas e insultos de forma recurrente. Literalmente, el tránsito es el principal daño a la salud mental, al bienestar social y a la calidad de vida. (Periódico Hoy, 25 marzo, 2024).

• La superficial e improductiva actuación de los líderes de las principales organizaciones políticas de oposición, a los que aparentemente solo les interesa mantener o incrementar sus respectivas cuotas de poder político, social y económico, en elecciones presidenciales y congresuales del domingo 19 de mayo de 2024. Hasta ahora, la única función que cumple la oposición política dominicana es la de criticar todo cuanto decide, hace y dice el gobierno de turno.

• Los viejos y jóvenes empresarios dominicanos, los cuales siempre han estado entregados en cuerpo y alma en acumular grandes riquezas materiales, sin importar lo que haya que hacer para satisfacer su angurria por el dinero. Por ejemplo, han logrado con el apoyo y complicidad de determinados políticos, insertar sus indignos e inhumanos negocios alrededor de la seguridad social (AFP-ADAFP y ARS- ADARS).

• El vil asesinato, por motivos pasionales, protagonizado por Ammy Hiraldo Peña, de 21 años, quien mató de varias puñaladas a la joven Yennely Andreyna Duarte Hilario, de 18 años.

• La certeza y justa lectura del Sermón de las Siete Palabras en la Catedral Primada de América, en la que el reverendo padre Gregorio Santa, criticó que, en 50 años de crecimiento económico, el país solo ha progresado en términos materiales. A juicio del prelado católico, en medio de un gran auge económico, las protecciones sociales son pírricas e irrisorias. «El sistema de seguridad social es una estafa burda con el apoyo del Estado y de la ley». (Reverendo padre Gregorio Santa, marzo, 2024).

Como se puede observar, la naturaleza y magnitud de los más recientes hechos acaecidos en diferentes regiones de República Dominicana, invitan a los dominicanos, principalmente a unos con más urgencia que a otros, a someterse a una limpieza espiritual sincera y profunda, con la finalidad de evitar que la energía negativa que irradian, continue dañando las instituciones, las empresas, los proyectos y los servicios que operan en sus respetivos entornos. Más allá del ámbito religioso, la limpieza espiritual es un recurso que ayuda a las personas a autoevaluarse interiormente. La limpieza espiritual profunda, no se alcanza lavando y ocultando culpas y malas prácticas.

Para realizar una limpieza espiritual energética sincera y profunda, no basta con visitar regularmente un templo religioso, vestido con una chaqueta, dar una jugosa limosna o acudir al confesionario a contarle al sacerdote sus diversos y múltiples pecados, buscando con ello que éste lave su alma y espíritu. Los líderes políticos, empresariales, laborales, sociales, gremiales, religiosos, los propietarios y ejecutivos de los medios tradicionales y digitales de comunicación, así como los influencers y los youtubers, que han actuado de manera irresponsable en contra de las leyes, normas, principios y costumbres de la sociedad dominicana, están invitados a autorrealizarse una limpieza espiritual con sal marina o sal de roca, para que se transformen en buenas personas, con propósitos significativos de vida.

En definitiva, es como dice Shakira en una de sus canciones: “No se puede vivir con tanto veneno. Pesa más la rabia que el cemento…”

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